Dicen que la diosa Venus-Afrodita surgió de las aguas del Mediterráneo y los griegos situaron su nacimiento en el sur de la península del Peloponeso. Yo creo que se equivocaron: la diosa nació aquí, en Venecia, y aquí se la tragará de nuevo el mar cuando las aguas devoren esta ciudad nacida para morir de un empacho de belleza.
VaP adelanta en exclusiva el próximo miércoles un capítulo del nuevo libro africano de Javier Reverte, “Colinas que arden, lagos de fuego (Nuevos viajes por África)”. Envía tus preguntas al escritor y llévate un ejemplar dedicado.
He viajado dos veces en cruceros y las dos me he prometido no volver. No sé si picaré en una tercera ocasión. Pero existe hoy un modo de cruzar los océanos que se asemeja en cierta forma al de antaño. Me refiero a los mercantes.
He visitado por dos veces la tumba de Selous, en las boscosas orillas del Beho Beho, una zona frecuentemente visitada por los leones. Me gusta el rito de visitar los lugares en donde reposan los restos de mis héroes de referencia.