El coñazo de Miami
Decir abiertamente que no te gusta EEUU puede ser cool. Te coloca en este egocéntrico mundo viajero de las redes sociales, donde se presume de barro, en el pelotón de los viajeros interesantes. A pocos se le ocurriría criticar un viaje a un poblado africano, un aldea del Nepal o una de esas villas centroamericanas en las que las rotondas son la mejor atracción turística. Это делает, aunque apenas hayas salido del hotelucho en el que dormías y candaras la puerta cuando se ponía el sol (mucho mejor si dormías en una tienda de campaña) todo fue fascinante.