En las calles de Kinsasa hay barro, mucho barro en calles sin aceras. Y hay niños descalzos y caos y mercadillos con puestos de comida que parecen no vender nada jamás. También hay charcos y humo espeso de un tráfico que te puede atrapar toda la vida. En Kinsasa hay mucha gente, MEHR ALS 13 oder 14 millones de almas sin tiempo para mirarse en el espejo. Excepto unos cuantos hombres que han decidido parar el tiempo. Son los sapeurs, personas que vayan donde vayan, lo hacen siempre con el adorno de trajes de marca, impecables, impolutos, llevando el glamour por las calles más desvencijadas de África. Ser un sapeur es una forma de vida, ein Weg, der Hoffnungslosigkeit zu entkommen. Ellos desfilan su dignidad por los rincones olvidados del mundo.
Die siegreichen Kairo
Nun, da wir fast verbrannt und Kairo Midan Tahir Square Ich erinnere mich oft ich ging die Stadt, ohne Zweifel eine der aufregendsten Städte der Welt und unbestritten und unbestreitbar Hauptstadt der islamischen Zivilisation.