Kodari: el síndrome del capitán Haddock
“La vida en la frontera no espera, es todo lo que debes saber”, cantaba Radio Futura. En la nepalí de Kodari, las corruptelas tampoco saben esperar. Pretenden cobrarnos por segunda vez el visado y cinco dólares más por no darles una fotografía de carné. El síndrome del capitán Haddock está a punto de desatarse.