Una noticia aparecida en el periódico Cape Argus decía literalmente así: “La célebre sexóloga, Doctora Eve, va a organizar una serie de encuentros para mujeres durante las próximas seis semanas en las que el país estará pendiente de hombres jugando con sus pelotas”.
La traducción es literal. (Se trataba de un tupper sex que la Elena Ochoa de la zona hacía aprovechando que ahora tendrá clientela, algo aburrida, de ver a sus maridos en modo off delante de la televisión).
Este primer párrafo salió publicado, tal cual, en la sección de internacional de Internet del periódico El Mundo. Lo que viene detrás, también:
Sin embargo, la Doctora Eve no está sola en su cruzada por un sexo feliz. Por ejemplo, los doctores Sheick Sharif y Maria Aisha, en la práctica curanderos, ofrecen sus servicios, al módico precio de 50 rands la primera consulta para toda una alta gama de problemas, sexuales y no sexuales, que dejan al ‘tupper sex’ de Lady Wasseman en un juego de niños. Ahí va un listado de los problemas que aseguran que antes de un semana se habrán solucionado tomando uno de sus brebajes (resultado garantizado, especifican): “Alargamiento de pene (aquí dicen que los efectos se notan en las primeras 24 horas), infertilidad, encontrar marido, pillar las infidelidades de tu pareja, tener orgasmos, eyaculación precoz y, en el no va más, devolver la virginidad”. Eso en la parte sexual afectiva, que las hierbas de los reputados Sharif y Aisha sirven también para “embrujamientos, ganar juicios, dejar de beber, ahorrar, tener más clientes, limpiar la casa de malos espíritus o arreglar el mal olor de los pies (va destacado; debe ser problema común)”.
Alargamiento de pene (aquí dicen que los efectos se notan en las primeras 24 horas), infertilidad, encontrar marido, pillar las infidelidades de tu pareja, tener orgasmos, eyaculación precoz y, en el no va más, devolver la virginidad
Una oferta parecida, pero para público musulmán, ofrece el Dr Príncipe Abed. Aquí tenemos una carta de posibles parecida a la anterior pero con detalles más prácticos como “problemas en el divorcio (no sabemos si hay rebaja para los clientes que accedieron a la consulta para encontrar mujer o marido) y ganar la lotería, casino o carreras de caballos”. Por supuesto, el Príncipe Abed también asegura resultados en un tiempo determinado. Por ejemplo, el ensanchamiento o reducción de pecho es en tres días, el mismo tiempo que tarda en conseguir, asegura, que una mujer se vuelva atractiva. El más genial es el referente al salario, del que aclara que en siete días aumentará, exactamente, un 58%. Sobre el alargamiento de pene, el doctor dice que “son siete días de espera pero un nuevo tamaño para toda la vida”.
Toda esta oferta, muy prolífera, se encuentra, por decenas, en las paradas de tren y autobuses de Ciudad del Cabo, donde se puede recoger, en el espacio de 50 metros, seis diferentes octavillas. Lo más preocupante es que también aseguran mejoras en los síntomas del sida y realización de abortos.
P.D. En seis días, tras acudir ayer la consulta del Príncipe Abed, contaré si es efectivo su tratamiento.
P.D.2. No sabía que era para internacional de El Mundo, creí que era para un blog que hacen de África.
P.D.3. No está bien fusilarme a mi mismo